Por mi tripa.
Hoy os voy a hablar de ella. Supongo que no hay
forma de expresar lo que la echo de menos. Pero todos nosotros estamos seguros
de que cuando vuelva, todo volverá a ser como antes y solo habrá sido como una congelación
del tiempo.
Realmente, la necesito a mi lado, porque
aunque probablemente yo sea una de las personas que mas la conoce en este
mundo, estoy segura de que 17 años es poco para conocer a una persona tan
grande como lo es ella.
Aunque no la vea cada día sigo teniendo en mi
cabeza la sonrisa que me echaba nada más salir de mi habitación cada mañana, la
forma en la que se moja los labios antes de hablar, su paciencia increíble.
Aunque no la vea cada día, nunca se me va a olvidar que ella ha sido mi segunda
madre. Aunque no la vea cada día yo se que ella nunca falla, ella hace que todo
sea posible.
Porque la distancia Londres-Madrid,
Madrid-Londres es poca, 1714 kilómetros son pocos para olvidarse de ella, mi hermana.
"Siempre estaré contigo mi pequeña" .
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